Yoga
¿un aliado para tu diabetes?
Licda. María José Bonilla Ávila / Nutricionista Clínica – Deportiva
Actualmente, es un desafío para la salud pública mundial, las enfermedades crónicas no transmisibles, dentro de las cuales podemos destacar la Diabetes Mellitus (DM), que se caracteriza por presentar cuadros de hiperglucemia, generando distintos disturbios metabólicos en la absorción de carbohidratos, grasas y proteínas, provocando defectos en la acción de la insulina. Su elevada prevalencia, se puede mejorar al evitar el sedentarismo.
Se recomienda, la incorporación diaria de actividad física, que se define como los distintos movimientos corporales, producidos por la contracción de los músculos esqueléticos del organismo, requiriendo un gasto de energía elevado y el ejercicio físico, que se considera como todos los movimientos planeados, estructurados y repetitivos para mantener una buena salud.
Es decir, que debemos elegir un ejercicio idóneo para comenzar. Lo más recomendable son los ejercicios aeróbicos, dentro de los cuales podemos centrarnos en las distintas posturas que la práctica de yoga nos brinda, como una excelente alternativa para el control terapéutico de los niveles de azúcar en sangre.
Al hablar de yoga, debemos tener presente que representa un conjunto de técnicas de dominio, incluyendo la meditación, encaminada a la liberación e integración armónica a nivel físico, mental y espiritual; logrando mejorar la calidad de vida de toda persona con DM, que lo practique de forma habitual.
Beneficios del Yoga:
- Genera una condición de hipometabolismo, creando una atmósfera interna, que conduce al bienestar de varios sistemas celulares. Mejora las respuestas inflamatorias y neuroendocrinas del organismo, controlando las glicemias sanguíneas y el perfil lipídico.
- Alinea, estira y brinda más fuerza a los músculos y huesos, ya que se utilizan posturas isométricas.
- Libera las articulaciones, por consiguiente, se genera un mayor grado de flexibilidad corporal.
- Reduce la mala circulación sanguínea, el sobrepeso y obesidad e incluso disminuye la depresión.
Posturas básicas
Aprendamos que, a través de la práctica de yoga, se mejora la respiración (Pranayana), se fortalecen posturas específicas (Asanas), incluyendo posturas de relajación (Dharana), meditación (Dhyana) y purificación (Kriyas).
Postura de la silla:
Fortalece piernas y glúteos, así como los brazos,
al ser como una sentadilla.
Postura del perro boca abajo:
Alarga la columna, evita problemas de cervicales
o dolores de cabeza.
Postura de cobra:
Aporta flexibilidad en la columna, fortalece los
músculos abdominales, glúteos y piernas.
Postura de la barca:
Fortalece los abdominales y promueve la
flexibilidad de todo el cuerpo.
Practica e involucra el yoga en tu vida diaria, ya que se trata de una alternativa wellness, que integra el cuerpo y la mente. Los ejercicios físicos, son parte de los pilares más importantes, para una salud óptima, pero recuerda que también debe mantenerse una alimentación saludable, baja en carbohidratos simples y alta en grasas buenas, que incorporen proteínas magras y una variedad amplia de verduras y frutas.
De forma específica, si empiezas a practicar yoga, tu alimentación debe proporcionarte un balance de energía y enfoque para tu entrenamiento, por lo tanto lo ideal es consumir verduras de hoja verde, frutos rojos y cítricos, cereales integrales y legumbres.