¡El colesterol alto puede ser consecuencia de un mal control de la glucosa o azúcar en la sangre!
Muchos pacientes con diabetes tipo 2 también tienen elevado el colesterol por tener resistencia a la insulina. Como respuesta al incremento de la glucosa luego de comer, su páncreas secreta insulina “solicitando que se permita el ingreso del azúcar a las células”, pero las células de su cuerpo están “un tanto sordas a este mensaje”. Así, el hígado toma el exceso de glucosa y almacena lo que puede como glucógeno, pero el resto lo convierte en triglicéridos y colesterol.
El colesterol es necesario para la flexibilidad de las membranas celulares y es la base para que su cuerpo inicie a fabricar vitamina D debajo de su piel mientras se expone al sol. A partir del colesterol se sintetizan ácidos biliares y hormonas como testosterona, estrógenos, progesterona, glucocorticoides (que controlan el metabolismo de la glucosa, proteína y grasa, por ejemplo, cortisol) y mineralocorticoides (que regulan la sal y los líquidos, por ejemplo, aldosterona). Sin embargo, la inflamación crónica causada por la hiperglicemia (glucosa alta) y/o el exceso de grasa corporal, en combinación con el colesterol LDL alto, está asociada a problemas cardiovasculares. Por lo tanto, es fundamental que las personas con diabetes tipo 2 reciban asesoría alimentario-nutricional y de estilo de vida personalizada para alcanzar niveles de glucosa y de colesterol saludables.
Quienes incrementan su actividad física logran reducir el número y dosis de fármacos para la diabetes. ¡El ejercicio funciona como medicina! Al evaluar glucosa e insulina en ayunas, generalmente se encuentran algún grado de resistencia a la insulina o prediabetes en quienes consultan por colesterol alto o por síndrome de ovario poliquístico. Los adultos que consultan con exámenes de laboratorio realizados mientras experimentaban estrés fisiológico (por ejemplo, infecciones debilitantes en garganta, bronquios o intestinos) manifiestan glucosa en ayunas y/o colesterol alto. Ocasionalmente, incluso comentan que el médico les midió la presión alta.
En la mayoría de los casos, una vez resuelven sus infecciones, la glucosa, el colesterol y la presión regresan a sus valores normales. Nota en la imagen que el riesgo de enfermedad es multifactorial.
Las personas con diabetes deben vigilar sus pensamientos y emociones; si éstos generan estrés psicológico, podrían ser una causa del descontrol de su diabetes, ya que el cerebro lo percibe igual que el estrés fisiológico.
MSc. Carolina Castellanos / Nutricionista